El diario lombardo L’Eco di Bergamo suele tener una página y media con obituarios. El viernes, el periódico tenía 10 páginas con anuncios, según el diario “La Vanguardia”. Italia, el segundo país del mundo con más casos de coronavirus después de China, es también el segundo con más muertos. En Lombardía, el problema de la saturación excede a los hospitales. También están colapsadas las morgues. En días en que se extreman precauciones y se reclama distancia social, llorar a los seres queridos es una pesadilla. Están prohibidas las ceremonias, por lo que las funerarias trasladan el cadáver desde las casas o los hospitales al crematorio o el cementerio, sin ningún rito intermedio. Pequeños grupos pueden acudir al cementerio a despedirse, y también puede ir un sacerdote. Pero morir en estas circunstancias es cruel: los familiares tienen prohibido hasta abrazarse.
Con la plata, no: desmienten que el dinero transmita el virus
La Organización Mundial de la Salud (OMS) rechazó un informe publicado en medios británicos, que señala que la agencia de la ONU había vinculado el Covid-19 con el dinero en efectivo. “Tergiversaron nuestras palabras”, dijo la portavoz de la OMS, Fadela Chaib. El artículo apuntaba que la OMS había dicho que los billetes podrían estar propagando el coronavirus. “Nos preguntaron si pensábamos que los billetes podrían transmitir Covid-19 y dijimos que la gente debería lavarse las manos después de manipular dinero, pues es una buena práctica de higiene”, agregó. La OMS asegura que “la enfermedad puede propagarse de persona a persona a través de pequeñas gotas de la nariz o la boca que se propagan cuando una persona con Covid-19 tose o exhala”. (Especial-DPA)